PDVSA, la estatal petrolera de Venezuela, compró un cargamento de 500.000 barriles de crudo estadounidense a la compañía PetroChina para entregado entre el 1 al 10 de abril 1-10 en el terminal de la isla caribeña de Curazao, reseñó la agencia Reuters este lunes, así lo reseña Reuters.
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Esta compra está separada de una gran licitación lanzada por PDVSA para comprar unos 8 millones de barriles de crudos de Estados Unidos y Nigeria que le adjudicó la semana pasada a las firmas British Petroleum y China Oil.
Tanto PetroChina como China Oil son subsidiarias de la estatal China National Petroleum Corporation (CNPC).
La carga a ser entregada por PetroChina el próximo mes podría contener petróleo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) o una mezcla de ese crudo, añadieron las fuentes.
PDVSA, necesita ahora importar crudo ligero para usarlo como diluyente para su petróleo extra pesado y con ello posibilitar su procesamiento en sus refinerías del Caribe. PDVSA comenzó a comprar crudo estadounidense WTI en enero.
Desde entonces, ha recibido dos cargamentos de 500.000 barriles y se espera otro del mismo tamaño en el buque tanquero Orpheas que llegará en Curacao esta semana.
La compañía pospuso otra licitación para comprar entre 2,1 millones a 3 millones de barriles de crudo Urales de Rusia, también para ser entregado durante el segundo trimestre, según las fuentes de Reuters. Las ofertas para esta licitación ahora serán aceptadas hasta la próxima semana.
Si PDVSA otorga la buena pro a todas ellas, las importaciones de crudo de la compañía estatal en el segundo trimestre se duplicarán hasta alcanzar unos 120.000 barriles por día (bpd).
Para cubrir la desaceleración en su red interna de refinación en medio de problemas de fallos de los equipos y de electricidad desde comienzos de año, la compañía también tiene una licitación abierta para importar un cargamento de 300.000 barriles de diésel ultra bajo en azufre (ULSD) para entregado en abril.
Cardón, la segunda mayor refinería doméstica de PDVSA, tiene dos de cuatro unidades de destilación de crudo fuera de servicio debido a problemas operacionales, dijeron trabajadores a Reuters el domingo. La instalación más grande de Venezuela, Amuay, estaba trabajando a media capacidad el 14 de marzo de acuerdo con un informe interno.