Andreína Coromoto Rodríguez Manzano, de 21 años, conocida como la «Sayona de Sanare), se habría provocado un aborto a las 32 semanas de embarazo.
ICC Asesores
La mujer, que se tomó unas pastilla y dio a luz a un bebé muerto que posteriormente enterró, fue detenida en el Hospital de Sanare por funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc del estado Lara.
De acuerdo con La Prensa Lara, habitantes del caserío Bojo, municipio Andrés Eloy Blanco, donde vive Andreína con su padre y su tía, la joven estaba embarazada de un hombre que no era su pareja y nadie lo sabía.
Presuntamente, el miércoles 14 de agosto se tomó una pastilla llamada Citotec, que induce a contracciones uterinas y puede causar aborto.
A los dos días Andreína comenzó a sangrar y presentó dolores. Se hallaba en su casa cuando tuvo un bebé de 2 kilos 950 gramos y 47 centímetros aproximadamente, totalmente formado y varón.
Posteriormente, llegó el padre de Andreína quien la vio ensangrentada, por lo cual tuvo que contarle lo ocurrido y le mostró el bebé, al que habrían enterrado a tres cuadras en un terreno baldío.
El sábado, tres días después, llegó a la casa la tía de la joven quien la vio muy enferma y también le contó lo sucedido. La mujer sugirió desenterrar el cadáver y acudir a un hospital para que se atendiera.
Supuestamente, tras ser ingresada, Andreína contó que había “perdido” al bebé, pero en el hospital no le creyeron puesto que el bebé estaba muy bien formado. Asimismo, presuntamente relató que no se hizo controles porque era un embarazo «no deseado».
Ante tal situación, agentes del Cicpc llegaron al lugar por denuncias de los trabajadores del hospital. A Andreína no le quedó más remedio que contar la verdad, de que se tomó una pastilla para abortar.
Redacción Maduradas con información de La Prensa Lara
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