Este sábado, durante la sesión plenaria de la VII Cumbre de las Américas que se celebra en Panamá con la participación de delegaciones de los 35 países del continente, Nicolás Maduro ofreció diálogo con Estados Unidos, pero aseguró que para ello debían “reconocer la independencia y soberanía” de Venezuela.
“Yo me encabrono cuando alguien habla de Venezuela porque yo no hablo de ningún país. Cada quien dirige su país con los métodos de su Constitución. Nadie debe meterse con Venezuela”, insistió. Además aclaró que la palabra «encabronar» no era mala palabra en Venezuela.
“Si no reconocen nuestra revolución seguirán estrellándose en el mismo muro de aislacionismo”, dijo el sucesor del fallecido Hugo Chávez asegurando que las élites de EE.UU. creyeron que con la muerte del anterior presidente venezolano “la revolución bolivariana se acababa”.
“Este decreto es muy peligroso (…) no es solamente la sanción de siete venezolanos honorables. Todo lo que dicen sobre ellos es mentira, es falso. Este decreto se mete en la vida interna de Venezuela”, lamentó.