Este 2018 inició con el pie izquierdo: aumento de sueldo, fiscalizaciones a las principales cadenas de superrmercados, saqueos y protestas. Sin embargo, uno de los sectores más críticos es el farmacéutico, sin duda, el cual inició el nuevo año con un inventario en cero que promete extenderse por un par de semanas más.
Los anaqueles de las farmacias están cada vez más vacíos de productos, especialmente de medicinas, aunque ello resulte contraproducente.
En un trabajo de investigación de Efecto Cocuyo se pudo determinar que las medicinas como la insulina y los antibióticos no solo se mantienen ausentes de las estanterías, sino que no podrán ser repuestas prontamente.
De acuerdo con las declaraciones de los encargados de los locales de salud tampoco cuentan con antihipertensivos.
Los únicos medicamentos que parecen estar salvados de la escasez son los antigripales y, aún así, la inflación los eleva a precios a aproximadamente Bs. 50.000.
Las tabletas y comprimidos para el resfriado común van de Bs. 24.000 a Bs. 120.000. Las gotas nasales oscilan los Bs. 30.000,
Redacción Maduradas con información de Efecto Cocuyo
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