Mark Chávez, el médico acusado de suministrar ketamina al actor Matthew Perry, se declaró culpable de conspiración para distribuir esta sustancia. En un acuerdo con la fiscalía, Chávez admitió haber obtenido la droga de forma ilícita y suministrarla al doctor Salvador Plasencia, quien a su vez se la proporcionaba a Perry.
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El médico de 54 años, que operaba una clínica de ketamina, enfrentará hasta 10 años de prisión por su participación en la muerte del actor de «Friends». En su declaración, Chávez reveló cómo obtuvo la ketamina y cómo se coordinó con otros involucrados para suministrarla a Perry.
La autopsia de Perry reveló una alta concentración de ketamina en su sangre, confirmando que esta sustancia fue la causa de su muerte. Los fiscales presentaron pruebas de mensajes de texto entre los médicos involucrados, donde discutían sobre los precios y la cantidad de droga que le suministrarían al actor.
Chávez ha acordado cooperar con las autoridades y entregar su licencia médica. Su abogado afirmó que el médico ha aceptado su responsabilidad y está dispuesto a colaborar en la investigación.
Redacción Maduradas con información de BBC Mundo
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