Oniel Castellanos, jefe de la sección de monitoreo de Protección Civil Maracaibo, explicó el pasado miércoles 9 de octubre en el programa De Primera Mano que el período seco en Venezuela ya no significa una ausencia total de lluvias, sino más bien una reducción en su frecuencia.
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Castellanos recordó que el fenómeno de La Niña se activó en los últimos meses del año, lo que ha generado precipitaciones más frecuentes y con mayores acumulados de lluvia, tal como lo han advertido varios expertos consultados por Radio Fe y Alegría Noticias.
Además, detalló que las altas temperaturas registradas en el país facilitan la formación de cumulonimbus, las nubes de tormenta más grandes, que al alcanzar la estratosfera congelan las gotas de lluvia en su interior, provocando fuertes vientos y granizadas al caer.
Castellanos destacó que en Maracaibo, en menos de 24 horas, se registraron casi 100 litros de agua por metro cuadrado, ocasionando inundaciones y la trágica muerte de una niña debido al desbordamiento de una cañada.
El funcionario también subrayó que las temperaturas del agua en el Caribe y en el Lago de Maracaibo superan los 30 grados centígrados, lo que intensifica las tormentas tropicales y huracanes. «Estamos viviendo ciclos de tiempo que nunca fueron registrados», advirtió.
El meteorólogo sugirió que es crucial actualizar los textos escolares de Geografía y Ciencias de la Tierra, para que los estudiantes cuenten con herramientas que les permitan comprender mejor los fenómenos meteorológicos que podrían impactar al país y su región.
También destacó la importancia de que las comunidades tengan acceso a información clara y sencilla sobre estos fenómenos, para prevenir tragedias y tomar decisiones acertadas, como usar ropa ligera en días calurosos, llevar paraguas si se esperan lluvias, evitar bañarse bajo la lluvia cuando hay vientos o tormentas eléctricas y no arrojar basura en las cañadas para prevenir desbordamientos e inundaciones.
Castellanos advirtió, además, sobre los riesgos de talar árboles sin conocimiento adecuado, ya que podrían caer sobre personas o viviendas.
En respuesta a las críticas de ONG y ambientalistas sobre la poda de árboles en la autopista 1 y la Av. Universidad de Maracaibo, Castellanos defendió estas acciones, argumentando que, de no haberse llevado a cabo, los árboles habrían podido caer sobre los vehículos debido a las lluvias y vientos, provocando graves accidentes.
Finalmente, enfatizó que la tala de árboles solo se permite cuando representan un peligro, especialmente en casos de plagas como el comején, y que estas acciones deben ser autorizadas por el Ministerio del Ecosocialismo, anteriormente conocido como Min Ambiente.
Redacción Maduradas con información de Radio Fe y Alegría
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