Ante la decisión del gobierno de Panamá de deportar a los migrantes que lleguen a su territorio de manera irregular y por la selva del Darién, las autoridades colombianas se prepara. Para atender a esta población que mayormente son de Venezuela, Perú y Ecuador.
Mientras tanto, los migrantes que están en Necoclí esperando para poder continuar su camino, aseguran que solo quieren usar el territorio panameño como tránsito y no pretenden quedarse en ese país.
“El perjuicio que nos están generando es no poder entrar y poder seguir por Panamá, porque la mayoría de las personas no nos quedamos allá, todos seguimos», señaló un migrante que lleva ocho días en Necoclí junto a ocho miembros de su familia.
Por su parte, la Personería de Medellín informó que estan en alerta y coordinando las acciones con la Mesa de Seguimiento de Migrantes para atender a quienes se queden varados en la capital antioqueña y a quienes decidan regresar a sus países de origen.
Al respecto, Julián Marín Toro personero delegado de la Unidad para la Protección del Interés Público de la Personería, manifestó: «El llamado es para que todas las autoridades estemos atentos a ese flujo de migrantes y que posiblemente se genere su regreso, el llamado es también para que no tomen vehículos informales porque pueden poner el riesgo sus vida».
Los subregistros sugieren que diariamente entre 1500 y 2000 migrantes llegan al municipio Necoclí, la mayoría logran salir y otros se quedan varados.
Redacción Maduradas con información de Caracol.
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