Una niña de dos años murió en Tucson, Arizona (EEUU), después de haber sido dejada dentro de un carro durante media hora en plena ola de calor.
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Las autoridades informaron que la temperatura, ese día, alcanzó los 111 grados Fahrenheit (43.9 grados Celsius).
El padre de la pequeña le dijo a la policía que la había dejado en el auto con el aire acondicionado encendido, pero que al regresar al vehículo la encontró inconsciente.
Lo que se reportó, es que la niña fue trasladada de inmediato a un hospital, pero falleció a causa del golpe de calor.
Las autoridades policiales aún están investigando el caso. Sin embargo, este hecho resalta la importancia de nunca dejar a un niño o mascota dentro de un vehículo, incluso por un corto período de tiempo, especialmente durante las olas de calor.
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Redacción Maduradas
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