El presidente Nicolás Maduro volvió a referirse este viernes a la «olla podrida» de la corrupción en Pdvsa por la que han sido detenidos más de 100 directivos de Petróleos de Venezuela y sus empresas filiales, esta vez para acusar de complicidad en el caso a la fiscal en el exilio, Luisa Ortega Díaz.
“Saben ustedes que semanas atrás llegaron a mis manos denuncias de corrupción en la Faja Petrolífera del Orinoco (…) Yo entregué esos documentos como pruebas en el Ministerio Público y no se procesaron (…). El esposo de la fiscal (Germán Ferrer) se fue con las denuncias y las pruebas a extorsionar a los corruptos de la Faja Petrolífera del Orinoco. La antigua fiscal tapareaba la corrupción, era cómplice de la corrupción“, dijo durante un acto con miembros del Plan Chamba Juvenil.
Maduro felicitó al fiscal impuesto por la Constituyente, Tarek William Saab por trabajar «sin descanso» en «desmontar las mafias en la estatal petrolera».
“Ahora estamos en una lucha. Esta lucha es amarga, produce amarguras, porque uno le entrega toda la fe y la confianza para que ejerzan sus cargos en los más altos puestos a un conjunto de personas. ¿Y saben qué es amargo? Que utilizan los cargos para robar. No me importa el nombre que tenga, no me importa el cargo que tenga, el que se meta a ladrón terminará juzgado”, acotó al destacar la detención de Eulogio Del Pino y Nelson Martínez.
Redacción Maduradas
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