Nicolás Maduro se quejó este domingo 26 de diciembre, en una entrevista con Ghassan Ben Jeddou para el canal árabe Al Mayadeen, al afirmar que el antiguo enviado de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, supuestamente se comunicó con su círculo familiar para causar revuelo en el Palacio de Miraflores.
“He contado algunas cosas”, dijo Maduro al ser cuestionado sobre los planteamientos de la comunidad internacional para que entregara el poder.
“En la época de Donald Trump, él tenía un señor llamado Elliott Abrams, jefe de una oficina de transición, era una especie de virrey designado para gobernar los territorios coloniales de Venezuela”, mencionó Maduro. “Ese señor tuvo la desfachatez de mandarle un mensaje a mi esposa, a Cilia (Flores), diciéndole que se divorciara de mí, que ellos le permitían a ella que se llevara a toda la familia al país que quisiera”, exclamó.
Asimismo, el vocero chavista comentó que presuntamente, Abrams “también hizo una oferta, que yo decidiera e país al que yo quisiera ir a vivir y que ellos me iban a proteger. O sea, que yo traicionara al pueblo de Venezuela, que traicionara la causa de Bolívar, de Chávez”.
Maduro aseguró que sus rivales políticos están “en el fracaso más absoluto”.
“Ellos persisten en esa política, bueno persistirán en el fracaso y se seguirán hundiendo en un pantano, mientras nosotros marchamos por nuestro camino de trabajo, bienestar, vida y felicidad”, dijo.