La solicitud del régimen de Nicolás Maduro de incluir en la negociación en México al empresario colombiano Alex Saab, señalado de ser uno de los testaferros del chavismo, es una situación que ha recordado el caso de Ricardo Palmera, alias Simón Trinidad, durante los diálogos de paz entre el gobierno de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Archivo
De acuerdo al diario colombiano El Tiempo, el guerrillero de las FARC cumple una condena de 60 años en Estados Unidos por narcotráfico y lavado de activos.
En efecto, recordaron que en abril de 2016 Rodrigo Granda, uno de los voceros de las ahora exFARC en los diálogos de paz con el gobierno Juan Manuel Santos, anunció que designaron a Simón Trinidad como coordinador de la entrega de armas.
«Trinidad es un hombre que tiene que estar metido de lleno en la cuestión de la recolección del armamento, llevarlo a donde se vaya a dejar, el inventario y el registro de entrega», aseguró Granda.
«Al colombiano Simón Trinidad lo nombraron negociador en la mesa de Cuba y continúa pagando su condena en Estados Unidos. Lo siguen esperando». Así lo manifestaron fuentes federales cuando el mencionado medio de comunicación les preguntó por la designación de Saab como negociador ante la oposición encabezada por el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó.
Saab fue detenido el 13 de junio de 2020 cuando su avión hizo escala para repostar en el Aeropuerto Internacional Amilcar Cabral, de la isla norteña de Sal (Cabo Verde), en respuesta a una petición de Estados Unidos cursada a través de la Interpol por presuntos delitos de blanqueo de dinero.
EEUU sancionó a Saab y tres hijos de Cilia Flores —Walter Flores, Yosser Flores y Yoswal Flores — en junio del 2019, acusándoles de operar un multimillonario sistema de corrupción relacionado con la importación y distribución de alimentos en Venezuela.
Según las autoridades estadounidenses, Saab se ha beneficiado personalmente de contratos sobrevalorados para suministrar alimentos a los Comité Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP).
En privado, según la agencia de noticias AP, los funcionarios estadounidenses han descrito durante mucho tiempo a Saab como el testaferro de Maduro, aunque no se le cataloga como tal en las presentaciones judiciales.
Estados Unidos quiere a Saab – quien se encuentra en proceso de extradición – porque cree que es la ruta para llegar a las fortunas ilícitas de Maduro y su séquito, y para conocer movimientos de oro y acuerdos con Turquía, Irán y Rusia.
Redacción Maduradas con información de El Tiempo
Lea también: