El dólar cotizaba el miércoles en cerca de 51,32 bolívares en la nueva plataforma cambiaria venezolana, Sicad 2, dijeron a Reuters operadores involucrados en las transacciones.
En la jornada previa el mecanismo basado en la oferta y demanda vendió divisas a un tipo de cambio promedio de 51,58 bolívares, u ocho veces por encima del tipo de cambio oficial preferencial de 6,3 bolívares.
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Los operadores bancarios agregaron que el nivel de transacciones iba remontando lentamente.
El Banco Central de Venezuela publicará el tipo de cambio ponderado al final de la jornada.
El Gobierno del socialista Nicolás Maduro lanzó el sistema para detener la escalada del dólar en el mercado paralelo y dar a la empresa un acceso más fácil al billete verde en medio de un control cambiario que acumula 11 años.
También podría servir para que las compañías transnacionales repatríen dividendos a sus casas matrices.
“Ya el sistema tiene beneficios, el riesgo país ha bajado, los bonos están al alza, casi 6 puntos; y el dólar paralelo bajó de 90 bolívares a 50-60 bolívares”, dijo a periodistas el miércoles el presidente del Banco Central, Nelson Merentes.
Sin embargo, a pesar de que el dólar paralelo retrocedió un 30 por ciento desde que el Gobierno anunció la puesta en marcha del Sicad 2, el miércoles volvió a repuntar y ya cotizaba en 81,96 según algunas páginas web que reportan su precio.
Aunque el Sicad 2 fue recibido por los inversionistas como un paso en la dirección correcta para mejorar las distorsiones económicas del país petrolero, muchos dudan si mitigará la sequía de divisas, en un país que depende de sus importaciones.
“El Sicad 2 aliviará parte de la demanda de divisas del país, pero es sólo una solución temporal que no resuelve el problema general”, escribió la firma de análisis financiero Stratfor, en una nota a clientes.
Operadores han dicho que no es posible verificar el volumen de las transacciones del sistema.
Maduro dijo que el Sicad 2 equivaldrá a un 7 por ciento de las ventas de dólares para cubrir la compra “de bienes no esenciales”. A pesar de ello, gran parte de los comercios en Venezuela usan el precio del dólar paralelo como marcador de sus precios, por lo que una débil oferta en el Sicad 2 podría presionar la inflación, hoy por hoy, la más alta de América.
“Es una vía interesante para destrabar el sistema cambiario”, dijo Eduardo Garmendia, presidente de la principal cámara de industriales del país, Conindustria, a una radio local.
“Pero tenemos que estar preparados para una inflación bastante mayor que la que hemos sufrido en los pasados años. Esto va a tener un impacto importante en los salarios y la capacidad de compra”, agregó.
Venezuela tiene una inflación anual de 57 por ciento y una importante escasez de bienes prioritarios, desde papel higiénico hasta leche, que han sido detonante de la mayor ola de protestas antigubernamentales en más de una década en el país petrolero.