Tras la fuerte recesión reportada en Venezuela desde 2013, algunos economistas y expertos en materia financiera pronostican escenarios más positivos para el país. Aunque los avances son “tímidos”, no son ignorados por las principales firmas económicas.
Adriana Loureiro Fernández / Bloomberg
De acuerdo con un trabajo publicado por El País, la economía venezolana podría tocar fondo en 2021. A pesar de que las cifras varían, y el madurismo mantiene la opacidad informativa, analistas financieros nacionales e internacionales visualizan un cierre de año con un panorama que oscila entre una pequeña recuperación de la actividad económica y una contracción moderada.
La primera compañía que hizo un análisis optimista fue la banca de inversión Credit Suisse, la cual proyectó una recuperación de 4% de la economía. De allí, un buen número de economistas venezolanos coincidieron en que ha terminado la «caída libre» vigente desde la grave crisis cambiaria de 2013, el año en que Nicolás Maduro asumió el poder. El Fondo Monetario Internacional (FMI), sin embargo, sigue previendo una recesión de 5 puntos del PIB venezolano.
Esta «modesta» recuperación tendría su razón de ser en el crecimiento del llamado «PIB petrolero».
«Se ha producido una pequeña recuperación de la producción del crudo nacional que pudo anclarse al remolque del aumento de los precios petroleros de este momento (…). El gobierno tiene algunos ingresos adicionales, y en los Estados Unidos los demócratas le están dando algún respiro a Venezuela para poder comercializar su crudo, relajando la presión de las sanciones», afirmó el economista Orlando Ochoa.
Henkel García, socio director de la firma Econométrica, apuntó que se puede hablar de «crecimiento económico» no como una posibilidad, sino como una «certeza». Por su parte, Asdrúbal Oliveros, economista y socio director de Ecoanalítica, manifestó que hay un «cambio cualitativo», un punto de inflexión en la economía nacional.
«La agresiva contracción de estos años parece haberse detenido. En 2022 prevemos una tasa de crecimiento económico de 4%. Esta es una estabilización en el foso, por supuesto. El país quedó con una economía pequeña y muy precaria», añadió.
Las razones de tales cambio tendrían que ver con el cambio de la política económica del régimen madurista, que finalmente ha adoptado medidas «amigables» con el empresario para, desesperadamente, generar estímulos de inversión internacional y aumentar la participación del dólar en la economía.
Redacción Maduradas con información de El País
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