La aparición de la variante ómicron ha despertado la preocupación de muchos ciudadanos y gobiernos del mundo, especialmente, por la poca información certera de que se dispone sobre la nueva cepa.
De acuerdo con ABC, en España, el Ministerio de Sanidad decretó cuarentenas para todos los infectados con la nueva cepa, aunque los afectados tengan completos sus esquemas vacunales. El objetivo sería evitar una mayor transmisión de la infección, a pesar de que se desconoce si, efectivamente, es más infecciosa, virulenta o capaz de escaparse a la protección de las vacunas.
Sin embargo, según Angelique Coetzee, presidenta de la Asociación Médica de Sudáfrica y la primera en alertar de la nueva variante de coronavirus, afirmó que los síntomas de la nueva variante son muy leves hasta ahora y, aunque señala que la edad podría tener relación con los casos documentados de ómicron, esta afirmación aún no es concluyente.
«(La primera paciente sudafricana presentó) un poco de dolor de cabeza, no tenía realmente dolor de garganta, lo describió más bien como una picazón, sin tos ni pérdida de gusto u olfato«, indicó la especialista.
ABC explica que un test de antígenos suele ser efectivo cuando se evalúa un caso positivo. Sin embargo, varios pacientes positivos han dado negativo. Además, no indica con cuál de las variantes se está infectado.
En todo caso, la PCR es la prueba más solvente. Una vez se detecta el virus, es necesario hacer un estudio de la secuencia genómica, el cual requiere de más recursos y tiempo. En esencia, es la misma muestra de PCR que se obtiene con el bastoncillo la que se utiliza para secuenciar.
En el hospital Gregorio Marañón de España se utiliza una tecnología de nanoporos que ofrece resultados más rápidos.
«Hemos logrado que todo el proceso se complete en cinco horas desde que se toma la muestra de PCR«, comentó Darío García de Viedma, responsable de la Unidad Genómica Microbiana del centro de salud.
Redacción Maduradas con información de ABC
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