Durante la noche de este martes 21 de julio, la senadora colombiana Paloma Valencia emitió un comunicado en respuesta a un artículo publicado por el portal Cuestión Pública, según el cual esta habría realizado un negocio con un empresario venezolano ligado al círculo del también empresario Alex Saab.
La Patilla- El Tiempo
De acuerdo con el medio de comunicación, la congresista y una familiar vendieron el 29 de diciembre de 2015 el terreno de una finca por 1.000 millones de pesos. El comprador fue la empresa Fomento y Desarrollo Inmobiliario (FDM). El representante legal suplente de la firma es el venezolano Luis Eduardo Sánchez Yánez, socio de Saab en el Fondo Global de Construcción S.A.
Valencia, sin embargo, se desligó de todo vínculo con el empresario colombiano acusado de ser el testaferro de Nicolás Maduro.
“No he tenido vínculo alguno con el señor Alex Saab, como se sugiere, en forma totalmente inaceptable, en el portal de internet Cuestión Pública. No conozco ni he tenido relación personal o comercial con el señor Álex Saab«, manifestó.
Añadió que siempre se ha manifestado en contra del régimen madurista y que, además, la compra de ese momento se celebró con una firma legalmente constituida que verificó el origen «lícito» de los fondos.
Habla el venezolano
Por su parte, el venezolano Sánchez Yánez admitió que, además de ser el representante suplente de FDI, la firma que hizo el negocio del lote vendido por la senadora es suya y de su esposa, quien firmó la escritura.
Detalló que la empresa se constituyó en Panamá, pero que se trata de un negocio familiar y que fue creada para dejársela a sus hijas.
Afirmó, además, que sería Álvaro Pulido, quien sería socio de Saab y también aparece en el expediente de la corte federal como su cómplice en el lavado de dinero, quien lo invitó a formar parte de la empresa de Saab: El Fondo Global de Construcción. Este último es la firma con la que el barranquillero empezó a construir casas de interés social para el régimen madurista. Así lo reseñó El Tiempo.
Sin embargo, Sánchez aseveró que el motivo por el que él mismo aparece como accionista para constituir la sucursal en Ecuador tiene que ver con que Pulido se lo pidió.
«No fui nunca accionista. El consultor jurídico fue diagnosticado con cáncer en la piel, y me pidieron el favor de aparecer en la constitución de la firma, en julio de 2012”, dijo.
Afirmó que cinco meses después, el 30 de noviembre de 2012, cedió la representación de las acciones.
Redacción Maduradas con información de El Tiempo
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