Largas colas deben aguantar los venezolanos para poder optar por alimentos a precio controlado. La situación se escapa frecuentemente de las manos y puede extenderse por horas en medio de disputas entre los presentes que guardan su puesto en la cola, llegando a generar que algunas personas sufran de ataques respiratorios, fatigas, desmayos y en algunos casos menores, se han reportado hasta infartos.
Usuarios de la red social Twitter informaron que una mujer se desmayó mientras hacía una cola para entrar a un Abastos Bicentenario en Cumaná, estado Sucre, con la intención de adquirir productos básicos regulados.
Criticaron que los funcionarios del Ejército Nacional observaban a la mujer sin reaccionar ni brindarle ningún tipo de asistencia, como se observa en la imagen.
«En este instante, mujer se desmaya esperando desde temprano que abran Bicentenario. Soldados indolentes no ayudan» dijo la usuaria @Luiselenu.