El 9 de mayo, un trágico accidente conmocionó a la comunidad cuando la aeronave en la que viajaba Bernardo Azócar, piloto con 54 años de experiencia, se precipitó en el Lago de Maracaibo poco después de despegar del aeropuerto La Chinita.
Noticia al Día
Azócar, oriundo del estado Barinas y con una larga trayectoria como piloto comercial, viajaba junto a su esposa, Hilda Rincón. Había recibido su formación en el Instituto Universitario de Aeronáutica Civil, ubicado en la Base Aérea Mariscal Sucre de Maracay, Aragua, aunque residía en Maracaibo.
El avión, un King 200 Air modelo BE 20, transportaba a cinco adultos y dos menores de edad, la mayoría de la familia Wolter, propietaria de la compañía Latinoamericana de la Construcción, S.A. (Laticon) y la ferretería Iron Wolter & La Guardia, en Maracaibo.
Tras la pérdida de contacto con el radar minutos después de despegar, las autoridades iniciaron la búsqueda de la aeronave y posibles sobrevivientes. Hasta el momento, solo se han recuperado partes del avión, incluyendo un ala y parte del fuselaje, identificadas con las siglas YV-3296.
Los restos fueron hallados en las cercanías de la isla de Zapara, específicamente en el sector La Cañonera del municipio Almirante Padilla y el bajito de Oribor, límite con el municipio Miranda en el estado Zulia.
Redacción Maduradas con información de Noticia al Día
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