Por órdenes del régimen de Nicaragua, durante la madrugada de este viernes 19 de agosto, agentes de la Policía Nacional ingresaron a la curia episcopal de la diócesis de Matagalpa, donde permanecía sitiado desde hace dos semanas el obispo Rolando Álvarez, junto a un grupo de colaboradores y religiosos.
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De acuerdo a lo reseñado por ACI Prensa, se pudo confirmar que el prelado fue secuestrado por los policías nicaragüenses y subido a un vehículo. De momento, no se conoce el destino al que fue trasladado.
Álvarez, de 55 años de edad, obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, es acusado por la Policía Nacional de intentar «organizar grupos violentos», supuestamente «con el propósito de desestabilizar al Estado de Nicaragua y atacar a las autoridades constitucionales», aunque hasta ahora no se han ofrecido pruebas por parte del régimen de Daniel Ortega.
«Preocúpense por llevar el traje de fiesta en el Reino de Dios», escribió Álvarez en la red social Twitter, pocas horas antes de ser arrestado.
Redacción Maduradas con información de ACI Prensa
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