Cada día los comedores sociales en Venezuela comprueban como aumenta el número de personas que se ve en la necesidad de recurrir a la caridad para conseguir un plato de comida. Los rostros que se ven en el comedor Madre Teresa de Calcuta, ubicado en Caracas, hablan por sí solos. Dicho lugar es frecuentado por desempleados, personas sin hogar y trabajadores con sueldos muy bajos. Uno de los principales problemas para el comedor es conseguir productos de alimentación básicos, debido a la escasez que golpea al país.
El portal de ACN reseñó un trabajo fotográfico desgarrador de la agencia Reuters. Véalo a continuación:
Carlos Son, de 60 años, se alimenta en el comedor Madre Teresa de Calcuta, en Caracas. Carlos vive solo y se gana la vida como gasfitero. Come en el lugar desde hace más de un año. Dice que no consigue empleo y está sin dinero.
Alí Villalta, de 58 años, vive en la calle. No tiene empleo. Se desempeñaba como trabajador de construcción.
Luis Rojas, de 53 años, vive con su hermano enfermo. No tiene empleo. Trabajaba como entrenador deportivo y come en el Madre Teresa de Calcuta desde hace seis meses.
Félix Ramírez, de 67 años, vive con su esposa y labora eventualmente como camionero y en el sector construcción. Asiste al comedor desde hace más de tres años. Dice que es demasiado viejo para encontrar trabajo.
Mónica Flores, de 43 años, vive en la calle. Trabaja como vendedora ambulante.
Vladimir García, de 56 años, vive con su hermano. Trabajaba como auxiliar administrativo y estudió historia en la universidad. Se alimenta en el comedor desde hace más de cinco años y asegura que disfruta de la comida.
Guillermo Osorio, de 40 años, vive en la calle y trabajaba como mecánico. Dice que se alimenta en el comedor desde hace más de cuatro años por necesidad y porque le gusta la comida
Felipe Cabral, de 65 años, vive en la calle y solía trabajar como un técnico de televisión por satélite. Se alimenta en el comedor desde hace más de ocho años.
Alexis Bello, de 43 años, vivió en la calle durante 20 años. Ahora vive con su madre. Solía trabajar como decorador. Se alimenta en el comedor desde hace más de 10 años, porque le gusta la comida y porque no tiene dinero.
Marisol Gil vive con su hermana y solía trabajar como un prestamista y comerciante. Ahora no tiene empleo. Asiste al comedor desde hace más de dos años.
Felipe Correa, de 62 años, vive en la calle y hace trabajos de limpieza. Admite que gasta todo su dinero en alcohol. Se alimenta en el comedor desde hace más de seis meses.
German Martínez, de 50 años, está desempleado. Dice que laboraba como constructor y se alimenta en el comedor desde hace más de dos años.
Fernando Escalona, de 51 años, vive con sus hermanos. Se dedica a la limpieza en un centro comercial. Asiste al comedor desde hace más de cuatro meses porque el sueldo que gana no le alcanza.
¡Estas fotografías impactan demasiado! ¡Cuánta tristeza se ve en esas miradas! – Comparte este trabajo fotográfico en tus cuentas en redes sociales y déjanos saber tu opinión al respecto.