Argenis Negrín es uno de los tantos venezolanos a los que les ha tocado acostarse a dormir sin comer a causa de la grave crisis económica que azota al país, que no permite que los ciudadanos tengan un vivir digno.
De acuerdo con lo reseñado por El Pitazo, Negrín vive junto a su esposa y sus tres hijos de dos, cuatro y siete años en la Urbanización Lomas de La Guadalupe de Ocumare del Tuy.
A pesar de que es beneficiario de una caja de comida de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), asegura que la misma solo cubre la alimentación de su familia por una semana.
“Mi último trabajo fue vendiendo café, pero el incremento de los productos me impidió seguir (…) Cada vez que me da hambre me refugio en la Biblia para meditar la situación y tratar de entender por qué está pasando todo esto”, confesó.
Los hijos de Negrín forman parte del grupo de 45 niños que acuden a comer todos los fines de semana al templo Nuestra Señora de Coromoto, de la parroquia eclesiástica San Diego de Alcalá, en Ocumare del Tuy, municipio Lander.
Redacción Maduradas con información de El Pitazo
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