El asesinato del fisioterapeuta de la Vinotinto, Jesús Alberto Guacarán, consternó al país que vive día tras día sumido en hechos de violencia de distinta índole.
El joven de 30 años salía de hacer compras en el Farmatodo de la calle 8 de Cabudare, cuando fue asesinado.
Narra El Pitazo que a la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda llegó su esposa, consternada. Se nota en las imágenes que estaba en avanzado estado de gestación.
La pareja esperaba su primer hijo. Estaban residenciados en Cabudare desde el año 2012, cuando Guacarán entró como preparador físico al Club Deportivo Lara. Tres años más tarde, se convirtió en el fisioterapeuta de la selección venezolana de fútbol, la Vinotinto, en las categorías sub 20 y absoluta.
“Sabemos que estaba en Farmatodo de la 8; salió de allá con unas bolsas, trataron de arrancarle las bolsas y le dieron un tiro. Para mí es un dolor muy grande. Lo que más lamento de esto es haber perdido a un gran amigo, un gran hermano. Quisiera que pusiéramos un granito de arena para que esto no siga pasando con las personas brillantes que hay aquí en el país», declaró el exdirectivo del Deportivo Lara, Massimo Scaccia.
Los testigos aseguran que al hombre le dispararon en el rostro cuando subía a su camioneta, una Toyota 4Runner, luego de hacer compras en el Farmatodo de la calle 8, en el este de Barquisimeto. El homicida portaba una chaqueta roja del Ministerio de Alimentación y andaba en moto junto a otro sujeto.
No obstante, el par de sujetos se dieron a la fuga sin arrebatarle las bolsas que cargaba consigo el fisioterapeuta.
Redacción Maduradas con información de El Pitazo
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