Aproximadamente entre 20 y 25 solicitudes de salida de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) se presentan diariamente. Hoy no son pocos los militares que observan con desconcierto cómo se han desdibujado los ideales que un día juraron defender.
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Aunque no se han divulgado cifras oficiales, el número de deserciones va en aumento todos los días, según información del portal web Tal Cual.
“Egresé de la Academia Militar en julio de 2010, y en agosto de 2016 me fui de baja luego de ocupar cargos de comandante de pelotón y de compañía, y jefe del tercer anillo de seguridad presidencial. Antes de irme también fui jefe de administración y logística en el Batallón 4 de febrero, en el 23 de Enero; allí tenía 130 personas a mi cargo. Mi salida fue muy fuerte y difícil, la Fuerza Armada era todo para mí y tenía muchas metas por cumplir. Pero en el batallón me decepcioné mucho porque había mucho dinero en las cuentas bancarias de la unidad y algunos comandantes querían parte de esos recursos”, cuenta un primer Teniente del Ejército, quien desde hace meses trabaja como personal de seguridad en un país latinoamericano, donde devenga un promedio de 430 dólares al mes.
Por su parte, un capitán del Ejército que se fue de Venezuela en febrero de 2018 cuenta que sus razones para abandonar la FANB están ligadas a la persecución política;
“Cuando deserté, por la persecución política y luego de una detención arbitraria, interrogatorio y tortura en la Dirección General de Contrainteligencia Militar, me percaté del rastreo que se hace en la zona fronteriza para buscar a los oficiales de la Fuerza Armada».
Por otro lado, el presidente del Frente Institucional Militar y vicealmirante retirado, Rafael Huizi Clavier, señaló:
“La mayoría solicita la baja para emigrar. No manejamos cifras pero la información extraoficial habla de 20%. Tenemos información de que las bajas son retenidas en los comandos de las unidades y componentes y se han visto casos de militares que desertan y se van del país. Incluso algunos viajan supuestamente de vacaciones en el exterior y no regresan”.
De acuerdo con Huizi Clavier, debido al creciente número de oficiales que desertan de los cuarteles para irse del país, el Ministerio de la Defensa restringe o no autoriza los viajes de los militares al exterior.
Mientras tanto, pareciera que Nicolás Maduro trata de agradar a los militares venezolanos con oro y petróleo.
Un teniente dijo que, según el testimonio de sus compañeros que permanecen activos, a los que intentan retirarse les ofrecen créditos del Banco de la Fuerza Armada “para mantenerlos atados a la institución”.
Redacción Maduradas con información de Tal Cual
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