Alexis García de 56 años se ha convertido en noticia, y es que un apagón de luz le dañó la oportunidad que esperó durante tres años -tiempo que duró en una lista- para un trasplante de riñón.
García perdió la operación por una interrupción eléctrica de más de nueve horas en el Hospital Universitario de Maracaibo, tal situación llevó a que el tiempo del órgano pasará de lo establecido para su implante, reseñó El Nacional.
“El riñón que me iban a poner se pudrió por la negligencia del director del hospital. Es por eso que voy a imponer una demanda contra Samuel Viloria (director del HUM) por negarme mi derecho a la vida”, declaró García con dificultad.
Para la nefróloga Anabela Arminio, que trabaja para el Servicio de Asistencia de Nefrología del Hospital Universitario de Caracas, el decir que el riñón que iba a ser trasplantado “se pudrió” es una versión “algo exagerada”.
“No es que el órgano se haya podrido. Es que cada órgano, una vez que es extraído del cadáver o el donante, tiene un aproximado de 48 horas para ser trasplantado o se correría el riesgo de que no funcionara de forma apropiada. No es algo que dure para siempre”, declaró.
El afectado señaló que, “ahora la excusa que tiene el señor Viloria para no reivindicarme por este acto de negligencia es que me acusan de ser colombiano. Como si ser extranjero ameritara atentar contra la vida de alguien”.
García asegura que esta acusación de Viloria le da a entender que “no cumple” con sus obligaciones de funcionario público, ya que parte de su trabajo es revisar los documentos de todos los pacientes que se atienden dentro del Hospital Universitario de Maracaibo.
Vía El Venezolano.