William Brownfield, quien durante casi una década estuvo encargado de la política antinarcóticos de Estados Unidos en el Departamento de Estado, desestimó que el conjunto de medidas adoptadas por el gobierno de Donald Trump contra el régimen de Nicolás Maduro representen una eventual intervención militar en el país caribeño.
Desde que fuera anunciado el operativo antinarcóticos por el mandatario estadounidense, que implicó el despliegue de buques cerca de las costas venezolanas para combatir el envío de drogas desde Venezuela, se generó un tenso clima en el que la posibilidad de una invasión volvía a ser mencionado al recordar, por ejemplo, cómo hace tres décadas Estados Unidos sacó del poder al exdictador panameño, Manuel Noriega.
«Lo que diría también es que no estamos en 1989. Han pasado 31 años y hay muchas opciones militares que no se parecen a las del último siglo y no requieren miles de soldados desembarcando en las playas de Venezuela y marchando hacia Miraflores», respondió enfático Brownfield en una entrevista concedida a El Tiempo.
Destacó que «hay formas de hacer intervenciones indirectas o usando tecnología, de causar trastornos a la cadena de mando, de establecer zonas humanitarias en la frontera o de ataques de precisión que se pueden lanzar desde miles de kilómetros de distancia si se quiere mandar un mensaje sin poner en riesgo a la población».
«No es que no exista apetito de ningún tipo. Lo que hay son muchas opciones disponibles que son diferentes a esas que se mencionan», explicó.
Redacción Maduradas con información de El Tiempo