La campaña de reelección del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, fracasó este jueves 5 de noviembre en su intento de que los tribunales detuvieran el escrutinio en Michigan, en la que argumentaba que no tenía el acceso suficiente a los lugares de cómputo de votos.
Esta es la segunda demanda que ha perdido la campaña de Trump en sus intentos de desafiar el escrutinio en varios estados clave, tras la derrota de su querella en Georgia; aunque el equipo del presidente sí ha ganado su petición de ampliar su acceso a los lugares de escrutinio de votos en Pensilvania.
Georgia confía en terminar el escrutinio de los votos antes de que acabe este jueves, mientras que en Pensilvania el conteo de los sufragios en un condado clave se aplazó hasta el viernes, lo que borra cualquier perspectiva de tener un resultado claro a lo largo de esta jornada.
Efe
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