La edición de febrero de la revista Vogue mostrará a la próxima vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, y el adelanto de su portada comenzó a generar polémica.
AFP
Las fotografías de la portada de la revista parecen haber acusado indignación en las redes sociales, donde la directora de la misma, Anna Wintour, ha recibido cientos de críticas principalmente por dos razones: sacar a la segunda mujer más importante de EEUU con zapatos deportivos y que las imágenes parecen haber sido alteradas para aclarar su piel, naturalmente oscura por ser afroamericana.
Se conoció que Harris aceptó posar para la revista siempre y cuando ella pudiera hacerse su propio estilismo que, según las imágenes filtradas, incluían un traje de chaqueta azul y sus zapatos Converse que la caracterizaron durante toda la campaña.
Las fotografías fueron tomadas por Tyler Mitchell, quien hizo historia al convertirse en el primer fotógrafo negro que firmó la portada de Vogue con unos retratos de Beyoncé en 2018; además, la editora a cargo de este trabajo fue Gabriella Karefa-Johnson, también afroamericana, al igual que Alexis Okeowo, el autor del texto.
Aunque Harris eligió lo que llevaría puesto, fue Vogue y su editora en jefe, Anna Wintour, quienes eligieron la portada.
La revista se defendió de las críticas señalando que la decisión de elegir una imagen informal de Harris era porque la fotografía capturaba su naturaleza auténtica y accesible.
Vogue
Redacción Maduradas con información de ABC.
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