Familiares de Jurubith Betzabeth Rausseo García aseguraron que su pariente no se encontraba participando de las protestas cuando fue asesinada el pasado miércoles 1 de mayo en Altamira, Caracas.
Explicaron que la víctima regresaba de su trabajo a bordo de una motocicleta que conducía su esposo cuando una bala impactó su cabeza.
Rausseo García trabajaba en un supermercado ubicado en el centro comercial Vizcaya, en El Cafetal, desde donde salió a las 4:00 de la tarde para dirigirse hacia su casa en La California. Tomaron vías alternas porque las calles estaban erradas debido a las protestas.
Cuando transitaban cerca de la Torre Británica escucharon detonaciones y decidieron regresar, a los minutos de haberse devuelto el esposo sintió cuando la mujer se desvaneció. La llevó a una clínica privada, pero murió cuando era intervenida quirúrgicamente.
La víctima dejó dos hijos, de 2 y 4 años, en la orfandad.
Redacción Maduradas con información de Caraota Digital.