Los caraqueños han podido librarse de la penumbra obligada en sus casas dentro de todos los planes de austeridad que se impusieron en la agenda del venezolano, pero no se sabe hasta cuándo. Los ingenieros electricistas no se aventuran a pronosticar que habrá un apagón nacional o en Caracas, pero sí plantean que se puede generar un “racionamiento rotativo planificado” en la capital debido a los niveles del Guri, algo que desde 2009 solo se ha realizado en el interior del país, reseña El Nacional.
Luis Motta Domínguez, ministro de Energía Eléctrica, declaró que a pesar del ahorro energético en el sector industrial y grandes consumidores, como centros comerciales y cadenas hoteleras, aún es necesario reducir en 70% el consumo en los conjuntos residenciales, pero no especificó planes de acción.
Créditos: Reuters
Iñaki Rousse, ex vicepresidente ejecutivo de la Electricidad de Caracas, explica que un apagón solo puede generarse por una falla. El experto destaca que si el nivel del Guri llega a las predicciones que el mismo ministro dijo, tendrán que bajar la generación del Guri y tomar decisiones de racionamiento.
“Caracas solamente tiene cubierto 25% de sus generación. Quiere decir que 75% depende del sistema interconectado, entiéndase que depende del Guri, y si este no tiene capacidad para todo el país, se ve la necesidad de restringir la energía en Caracas para mantener otras regiones”, explicó Rousse.
Alertó que los recientes apagones como consecuencia de la explosión de tanquillas de electricidad se deben a que las redes subterráneas están empezando a fallar por falta de mantenimiento. “Si hay cortes de luz los tiempos de restitución serán cada vez más largos”, advirtió.
La pregunta es si la ciudad está preparada para seguir su ritmo con cortes de luz planificados o no. El ingeniero electricista Miguel Lara indicó que lo recomendado es el racionamiento de luz. Explicó que en la ciudad existen “los circuitos no cortables” para que no se vean afectados los hospitales, clínicas, sistemas de comunicación, sedes de bomberos y policías. “No debería darse un corte de luz en estos lugares al menos que el circuito falle en su totalidad”, explicó.
Lo mismo aplica para que el Metro de Caracas continúe trabajando en el sistema de tracción o estaciones de servicios. “En Caracas hay otro problema adicional que son clínicas que funcionan en casas. A veces ni la empresa eléctrica sabe que es un centro de salud y pueden verse afectadas”.
“No hay que crear alarma. No es que mañana no tendremos luz. Aquí hay un sistema bien diseñado que tiene flexibilidad para operar. Si no hay energía, hay que racionar”, concluyó Rousse.
Servicios se pondrán a prueba con cortes eléctricos
De cortarse la luz los centros asistenciales deben tener plantas eléctricas para seguir funcionando, pero no basta un funcionamiento de horas. Se necesitan contingencias de días para tomar precauciones.
Rodrigo Mijares, coordinador de la Unidad de Gestión de Tecnologías en Salud de la Universidad Simón Bolívar, recomienda que una planta pueda abastecer mínimo tres días de energía eléctrica en terapia intensiva, emergencia, laboratorios, imagenología, quirófanos y, al menos, un ascensor. Hasta ahora los centros manifiestan que solo terapia intensiva y quirófanos estarían disponibles con luz, por lo que el experto insta a probar las contingencias.
En el Hospital Los Magallanes de Catia su planta eléctrica es de 456 kva y solo duraría 14 horas, según su director, Mario Laya. Solo alimenta los sitios críticos como terapia intensiva, quirófano y emergencia.
En el Hospital Vargas, el ingeniero Jhonny Bello aseguró que hay una planta eléctrica de 1.500 kva que en un momento de emergencia está capacitada para generar energía durante cuatro días para cubrir Terapia Intensiva, Quirófano y Emergencia. Otra planta de 300 kva podría durar dos días en funcionamiento y solo alumbra algunos pasillos. Las luces de emergencia no existen en el lugar.
En el Hospital Universitario de Caracas una fuente asegura que tiene tres plantas que durarían hasta una semana, dependiendo del gasoil que tengan a la disposición. La tercera, que aún no está operativa, alimentaría las salas de Radio X. Las otras son para emergencias de niños y adultos, y quirófanos. Mientras que en el Hospital General Dr. José Ignacio Baldó, conocido como El Algodonal, la planta ha funcionado hasta tres días en terapia intensiva.
El tránsito.
Las fallas en la red subterránea prolongan cada vez más la restitución de la luz. En el caso de un corte no programado y prolongado, el tránsito en la ciudad colapsará.
El Metro de Caracas, que traslada al menos 2 millones de personas diarias, no puede movilizar sus trenes si no hay energía eléctrica. Rousse explicó que el sistema de tracción está alimentado con dos circuitos de las subestaciones Convento y Magallanes. Si se pierde una, es reemplazada por la otra. “Tiene que haber un nivel de falla grande para afectar al Metro”.
Ricardo Sansone, de Familia Metro, dijo que los trenes necesitan para moverse la misma cantidad de energía que surte a un vecindario. “Cuando se va la luz en una estación se tiene un banco de batería que no alimenta ningún sistema de confort, sino de apoyo vital: sistema de control de trenes, incendio, cámaras, comunicaciones, bomba contra incendio. Solo funcionará un tercio de la estación para sacar a la gente desde el andén hasta la calle”.
En los trenes la luz duraría entre 1 hora y 90 minutos para desalojar a las personas. Solo quedarían activas las comunicaciones y un tercio de la iluminación del vagón. No habría aire acondicionado.
Recomendaciones frente a un corte de luz
Nelson Hernández, especialista en Políticas Energéticas, especifica una serie de recomendaciones que los ciudadanos deben tomar en cuenta si surgiera una eventualidad en el sistema eléctrico. “Al ocurrir el apagón, lo más sano es desconectar todos los artefactos eléctricos aun cuando tengan sistemas de protección de voltaje. De esta manera protegerás los equipos de variaciones bruscas de voltajes y ayudarás a aliviar la carga (demanda) para el restablecimiento del servicio”, expresa.
√Se debe tener al alcance: alimentos no perecederos, preferiblemente envasados, dinero en efectivo (los cajeros no funcionarán), linternas, cocina a gas, velas o lámparas de aceite, fósforos, agua potable y un equipo de primeros auxilios
√En la casa: los miembros de la familia no siempre están juntos cuando ocurre una emergencia, pero la familia podrá reunirse si tienen un plan que todos conozcan. Los familiares deben tener un punto de encuentro afuera del lugar de residencia y otro fuera de la comunidad. Se debe establecer un contacto fuera de la ciudad o del estado. “Durante una emergencia es más fácil llamar a un número de larga distancia que a uno local”, cita el informe.
√Comunicaciones: se debe tener a mano el cable para cargar el celular desde su carro. También puede tener baterías auxiliares externas de larga duración. Ubicar un radio de baterías listo para monitorear las noticias y los adelantos en la solución de la falla eléctrica
√Evacuación de tren en estación: el conductor informará cuándo se debe desalojar. Si se está en el andén se debe mantener detrás de la línea amarilla. Antes de iniciar la evacuación de un tren, el conductor debe bajar a las vías para preparar el descenso de los pasajeros del tren.
Información de El Nacional.