¡La buena nueva! Al parecer el presidente Nicolás Maduro se aburrió de los lujos del Palacio de Miraflores y decidió mudarse a un apartamento de la Gran Misión Vivienda Venezuela, junto a su primera combatiente, Cilia Flores.
Las declaraciones fueron dadas desde las afueras de Miraflores. Flores, al escuchar a su esposo, sonrió y no dio respuesta a sus declaraciones.
Destacó que estos urbanismos cuentan con todo lo necesario para satisfacer las necesidades de la familia venezolana y reiteró su rechazo a la ley, propuesta por el Parlamento, que otorga títulos de propiedad a los beneficiarios de la Misión Vivienda. Aseguró que el reglamento solo privatizaría el programa gubernamental.
“La revolución antes de la GMVV había construido más de 570.000 viviendas. Ahora, en 17 años, hemos construido 1,58 millones de hogares para el pueblo más de lo que se había construido desde 1988 hasta 1998 en este país”, aseveró.
Con información de El Nacional