La Fiscalía de Colombia descubrió la existencia de un lugar de explotación sexual de venezolanos en Barranquilla, dirigida por Javier Antonio López Bermúdez y José Luis Aduén Uribe, hombres que se hacían pasar por religiosos de congregaciones anglicanas.
De acuerdo con lo reseñado por El Heraldo, en la llamada “casa del sexo” sometían a los venezolanos a extenuantes jornadas de ‘trabajo’ con shows sexuales por cámara web.
Según el investigador, ambos sujetos podían obtener entre 60 y 50 millones de pesos al mes. No obstante, pese a esas ganancias, las víctimas aseguraron que eran mantenidos en condiciones de hacinamiento, con problemas de salud y bajo amenazas relacionadas con el llamado de Migración Colombia.
Con respecto a los horarios de trabajo, el rotativo reseña: “Desde las 2:00 a.m. hasta las 8:00 a.m., le toca al grupo de las ‘trans’; de 8:00 a.m. a 2:00 p.m. al grupo de mujeres; de 2:00 p.m. a 8:00 p.m., Yuli sola; y de 8:00 p.m. a 2:00 a.m., Marian sola”. Así ordenaba aparentemente Javier López Bermúdez.
Foto de los horarios de trabajo:
Redacción Maduradas con información de El Heraldo
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