Más de 35.000 muertes por coronavirus podrían haberse evitado en Estados Unidos si las medidas de distanciamiento social hubieran comenzado una semana antes, según nuevas estimaciones de investigadores de la Universidad de Columbia en Nueva York.
Según sus simulaciones, llevadas a cabo con varios modelos y publicadas en la página científica medRxiv, 61% de los contagios -es decir más de 700.000 casos- y 55% de las más de 65.000 muertes -más de 35.000- registradas al 3 de mayo “podrían haberse evitado” si las medidas de distanciamiento social y otras herramientas para controlar la epidemia se hubieran implementado “solo una semana antes”.
De acuerdo con los investigadores, estas simulaciones también confirman el peligro de una relajación de las medidas de confinamiento, que ha comenzado con distinta intensidad en todos los estados estadounidenses para limitar el impacto económico de la pandemia.
Hace diez días, el documentalista y activista Eugene Jarecki instaló un “reloj de la muerte” en Times Square, en Nueva York.
El aparato muestra la cantidad de muertes que, según él, podrían haberse evitado en Estados Unidos si el presidente Donald Trump hubiera decretado normas de distanciamiento y el cierre de escuelas el 9 de marzo en lugar del 16 como lo hizo.
Su “contador” muestra cifras superiores a las de los investigadores de Columbia, pues parte de la base de que actuando una semana antes se podrían haber evitado el 60% de las muertes.
Estados Unidos es el país más afectado del mundo por la epidemia en términos absolutos, con más de 1,5 millones de casos y más de 93.000 muertes registradas el jueves por la Universidad Johns Hopkins.
Con información de AFP