La Guardia Costera de Venezuela recuperó el sábado 12 de diciembre varios cadáveres que se encontraban a 13 kilómetros de las costas Güiria, estado Sucre.
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Archivo
Las personas fallecieron luego de que la embarcación en la que viajaran hacia Trinidad y Tobago naufragara.
En un principio trascendió que 11 cadáveres fueron encontrados el sábado, cifra que subió a 14 y posteriormente a 22 tras supuestamente encontrar 8 cuerpos en alta mar este lunes 14 de diciembre.
La periodista Analid Rojas escribió en La Patilla que el peñero “Mi Recuerdo” salió rumbo a Trinidad y Tobago el pasado 6 de diciembre, sin embargo, naufragó con 30 personas abordo aproximadamente, entre ellos estaban niños, mujeres y hombres.
Pese a que todavía se desconoce quién maniobraba la embarcación, trascendió que Luis Alí Martínez, de 56 años de edad, era el dueño de la lancha.
Este lunes, el fiscal general del régimen de Nicolás Maduro, Tarek William Saab, indicó que Martínez había sido imputado por los delitos de tráfico y trata de personas.
El diputado a la Asamblea Nacional (AN) Robert Alcalá señaló que supuestamente el gobierno de Trinidad y Tobago detuvo el peñero con aproximadamente 30 personas y lo devolvió a Venezuela. Esa nación negó que sus autoridades tengan algo que ver con la tragedia.
“La embarcación se hunde por la cola donde está el motor y la punta del barco flota. Como el oleaje es muy fuerte en este sector, las personas se amarran a la punta del barco o a cualesquier enseres que quede flotando, porque normalmente no llevan salvavidas. Sin embargo, está por confirmarse si las personas a bordo de ‘Mi Recuerdo’ estaban amarradas”, precisó.
Alcalá presume que tras ocurrir esa situación, las personas perdieron la vida por deshidratación.
“En la zona conocida como ‘Boca de Dragones’, entre Cariaquito y la isla trinitaria ‘Chacachacare’, existe la mayor peligrosidad para la travesía de los peñeros, porque se pierde el rastro de las embarcaciones, ya sea por las condiciones de navegación o por la intervención de las bandas criminales dedicadas a la trata de personas y tráfico de drogas”, explicó.
Cientos de venezolanos empezaron a dejar el país desde las costas en pequeñas embarcaciones hacia las islas caribeñas más cercanas.
Desde las costas de Falcón, muchos toman el riesgo de navegar hasta las islas de Aruba, Curazao y Bonaire.
A su vez, en las cosas del estado Sucre, los ciudadanos optan por trasladarse a Trinidad y Tobago, aliado del régimen de Maduro.
El bloque parlamentario de Sucre indicó que 102 personas han desaparecido desde 2018 en la ruta marítima entre Güiria y Trinidad y Tobago.
Redacción Maduradas con información de La Patilla.
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