El economista especialista en petróleo, Quiroz Serrano, informó que la escasez de gasolina en Venezuela habría obligado al régimen de Nicolás Maduro a aumentar la importación de combustible al país.
AFP
Según explicó la fuente en declaraciones para El Nacional, el pasado fin de semana 18 y 19 de abril salió de México un tanquero con 2,5 millones de combustible, que tardaría aproximadamente siete días en llegar a Venezuela.
«Eso ayudará a paliar la situación por unos 20 ó 25 días. Pero se tendría que ver cómo se resuelve esto finalmente», especificó Serrano.
Para el economista, la agudización de la escasez de combustible en la ciudad de Caracas, como ocurre desde hace meses en el interior del país, genera gran preocupación en la cúpula del régimen.
«Por supuesto el gobierno le teme por muchas razones. Esto podría traer un impacto social mucho más fuerte que la misma pandemia y esa escasez podría traducirse o significar un detonante que estuviera incendiando un estallido social en Venezuela», señaló.
En su desesperación por paliar la crisis, Serrano dijo que Maduro habría recurrido a Wilmer Ruperti, un inversionista del transporte marítimo venezolano que fue sancionado en 2019 por Estados Unidos, debido a sus vínculos con el régimen chavista.
«Se hizo un contrato con Ruperti de dos cargamentos que suman un total de 3,5 millones de barriles. Tengo entendido que uno de esos tanqueros ya lo consiguieron en Holanda y el otro cargamento lo están consiguiendo en Turquía con dos barcos de bandera griega», puntualizó Serrano.
Una segunda fuente, que reservó su identidad, también hizo referencia a la llegada a Venezuela de dos barcos con gasolina. Uno habría arribado en Carenero, Miranda; y otro a Guaraguao, en Puerto La Cruz.
Sin embargo, destacó que este combustible no puede ser utilizado aún para el consumo mientras no sea mezclado con otros productos para aumentar su octanaje.
«Es probable que con esos mismos aliados logren traer componentes para la refinería de El Palito, que estarían usando como mezcladora, y obtener volúmenes mayores», agregó.
A pesar de ello, no han logrado conseguir el arranque de la unidad de Craqueo Catalítico en Lecho Fluido, en la refinería El Palito, por lo que la producción de gasolina se mantiene paralizada.
Redacción Maduradas con información de El Nacional