Alias «Concho», su nombre es desconocido hasta por las autoridades, es uno de los venezolanos clave en la investigación del doble asesinato y descuartizamiento de Calef Torrico y Rubén Matamoros en el hostal Señor de Sipán, en San Martín de Porres, Perú.
América Noticias
A las 11 de la noche del pasado 7 de setiembre, horas antes del macabro crimen, cámaras de seguridad captaron a «Concho» en los exteriores del hostal del horror compartiendo con unos amigos.
Uno de sus acompañantes es Angelberth Díaz, uno de los presuntos descuartizadores. En las imágenes se puede ver cómo ambos se conocen e incluso «Concho» le ofrece un vaso de licor.
A «Concho» se le atribuye la coordinación con los asesinos de las víctimas. Su imagen figura como la persona que contacta con Angelberth Díaz, Jonathan Donayre y Leslwy Linares para que cometan los asesinatos.
Por si fuera poco, también está en el organigrama de una banda criminal dedicada a la venta de drogas al menudeo, donde también aparecen las víctimas del crimen.
Según la policía, «Concho» se encargaba de recaudar el dinero de las ventas y bajo su mando están los conocidos como «Cachorro» y «Jesús», que también se muestran en los videos de las cámaras de seguridad del hostal, mientras cargan los restos de Rubén Matamoros y Calef Torrico.
Redacción Maduradas con información de Trome.
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