El Gobierno sigue con sus improvisaciones. A raíz de la fuerte sequía que azota la región, en Venezuela se han tomado medidas de racionamiento en el servicio de electricidad y agua, debido a la falta de organización y previsiones.
Por ello, el Ejecutivo ha tenido que cerrar embalses de agua y apuesta por el fenómeno de “La Niña” para revertir los efectos de la sequía, según informó Ernesto Paiva, ministro de Ecosocialismo y Aguas.
“Tenemos el Canoabo (Carabobo), que está fuera de servicio, no tiene agua. Esta Clavellinos (Sucre) está con muy bajo nivel, y en el estado Falcón prácticamente todos los embalses están en bajísimo nivel. Hacia el centro del país el embalse Lagartijo (Miranda), que abastece parte de Los Valles del Tuy y la Gran Caracas, está fuera de servicio también por bajo nivel”, dijo Paiva en entrevista a Panorama.
“Tenemos algunos embalses que han salido de servicio, y otros que están en bajo nivel, todos ellos esperando en estos momentos las ansiadas lluvias”, agregó.
Paiva estimó que las lluvias llegarán durante el segundo semestre del año debido a los efectos que generará “La Niña” en el país.
“Esperamos que se establezcan las lluvias, y lo otro es que hay una probabilidad mayor del 50%, para que en el segundo semestre tengamos el fenómeno de La Niña en el país, que es el opuesto al ‘Niño’, es decir, se enfrían las temperaturas de la superficie del océano Pacífico y genera lo contrario a El Niño (…) La Niña al sur trae sequía, es decir, que para nosotros traerá lluvias, eso es una buena noticia, pero hay que tomar las previsiones del caso”, explicó.
Para Paiva, hay más del 50% de de probabilidad que lleguen las lluvias en Venezuela a partir de junio. “La Niña al sur trae sequía, es decir, que para nosotros traerá lluvias, eso es una buena noticia, pero hay que tomar las previsiones del caso”, agregó.
Con información de El Estímulo