Este domingo 15 de octubre los venezolanos eligen a los gobernadores de los 23 estados del país a través de unos comicios convocados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) con casi un año de retraso y en medio de confrontaciones, desánimo e irregularidades.
Foto: EFE
Más de 18 millones de electores están convocados a ejercer su voluntad, de los cuales al menos 700.000 fueron afectados con reubicación de centros a última hora y sin previo aviso de parte del ente electoral. Lo anterior es conocido como “el ratón loco”, una técnica fraudulenta nicaragüense que busca causar desconcierto y desinformación en la población, alentando la abstención.
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Las rectoras del CNE justificaron la medida asegurando que los cambios corresponden a centros donde se presentaron “hechos violentos” en los últimos comicios, pero ciudadanos y candidatos coinciden en que se trata de una jugada para perjudicar el voto opositor. Algunos votantes incluso fueron reubicados desde Aragua, hasta lugares tan distantes como Amazonas.
Otra técnica sucia que usó el ente electoral fue no realizar la sustitución de candidatos en el tiempo previsto, pese a que se siguieron los pasos y procedimientos correspondientes. Por lo anterior, el elector tendrá la opción de elegir entre el abanderado chavista y el opositor, pero además, entre otro u otros tantos que competían con este último y que finalmente retiraron su candidatura tras perder en el proceso de primarias y alcanzar acuerdos entre los partidos. Este método podría generar votos nulos, afectando una vez más a la oposición.
Redacción Maduradas.