El Gobierno venezolano sigue apostando a la improvisación. El alto y desajustado costo de la vida en el país parece no tener remedio, por lo menos a corto plazo, ya que el Fondo Monetario Internacional (FMI) pronosticó para 2016 la continuación de la «recesión profunda» que actualmente se sufre.
El dirigente Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) y exministro de finanzas, Rodrigo Cabezas, aseguró este martes que el Ejecutivo confía en que los malos pronósticos del FMI para el país no se cumplan, y la inflación «sea mucho menor» de la vaticinada.
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Cabezas, vicepresidente de la Comisión de Asuntos Internacionales y miembro de la Dirección Nacional del Psuv, presentó en Madrid una jornada de solidaridad con la Revolución Bolivariana, que se celebra en varias capitales europeas, entre ellos Madrid, con el objetivo de denunciar las «injerencias» de Estados Unidos a Venezuela.
El exministro consideró el incremento de la inflación venezolana como «preocupante», pero confía en que la evolución sea «mucho mejor» que vaticinada por el FMI.
Cabezas, que también es economista y profesor de la Cátedra de Economía Venezolana, cree que la solución pasa por una «mayor y mejor» integración de las economías Latinoamericanas, y la creación de herramientas internacionales, como un Fondo Latinoamericano de Reservas.
La solución a los problemas de América Latina se encuentra, a su juicio, en el proyecto de integración latinoamericana que han levantado los Gobiernos de izquierda en distintos países, y que es «muy superior a cualquier proyecto de dependencia y subordinación» que plantean los partidos de derecha.
En este sentido, recordó la igualdad y pobreza que provocaron estas formaciones en los programas de ajuste económicos que implementaron en la década de los ochenta.
Con información de EFE citada por El Mundo, Economía y Negocios