Una venezolana de 25 años viajó a España para alquilar su vientre a una pareja gay radicada en Barcelona, pero terminó en la emergencia de un hospital debido a intensas molestias en su vagina, presentando infección y restos de esperma en la zona lesionada.
Foto: El Español.
Al ser cuestionada por lo sucedido, la joven contó que la pareja le compró el pasaje desde Venezuela hacia España para que tuviera a su bebé, para ello decidieron hacer una inseminación casera, ilegal y si control médico ni sanitario.
La pareja, conformada por un empresario de 48 años, identificado como Román, y un venezolano de 29, quedó detenida.
Ambos fueron acusados por explotación sexual, tráfico de menores en grado de tentativa, lesiones y delito contra los derechos de los trabajadores.
Se conoció que la pareja gay tenía deseos de tener un hijo, pero no quería adoptar o pasar por los trámites o costos de tener un vientre en alquiler, por eso decidieron contactar a la venezolana y llevarla a España para que tuviera a su hijo a cambio de dinero.
Debido a la crisis que se vive en Venezuela, la muchacha accedió al plan y llegó al país europeo a finales de octubre. Le dieron trabajo en la tienda de decoración navideña propiedad de Román, debía trabajar mientras quedaba embarazada, pero en el tiempo que trabajó no cobró.
Tampoco le pagaron la primera mitad del monto acordado por cumplir con el plan, que debían cancelarlo cuando ella llegara a España y la otra mitad la recibiría al dar a luz. Luego debía entregar al niño a la pareja y desentenderse de él. La engañaron asegurándole que esa práctica era legal en España.
Durante un mes intentaron sin éxito inseminar a la venezolana, lo que generó que comenzaran a ofrecer malos tratos a la muchacha, acompañados por intentos que comprometían cada vez más su salud.
Foto: El Español.
Redacción Maduradas con información de El Español.