Un nuevo escándalo explotó en Argentina. Este viernes se conoció que Ginés González García, ministro de Salud reservó 3.000 dosis de Sputnik V, la vacunas rusa contra COVID-19, para vacunar a familiares y amigos.
La Nación de Argentina informó que González García informó que muchas de esas vacunas recalaron en el Hospital Posadas y entre quienes se vacunaron sin respetar el calendario de vacunación figura Lisandro Bonelli, sobrino del funcionario y su jefe de gabinete en la cartera sanitaria.
En la cartera sanitaria explicaron que obedeció a que el funcionario compartía la diaria con el ministro, que tiene 75 años.
El último capítulo de esa trama tuvo que ver con la sala de vacunación que se montó esta semana en la propia cartera de Salud, con enfermeros del Hospital Posadas. Allí se vacunaron funcionarios, empleados públicos y choferes que estaban bajo el ala de González García y que no son personas de riesgo, ni deben vacunarse en esta etapa del operativo.
Invitado por un secretario de González García, en ese operativo «vip» se vacunó el periodista Horacio Verbitsky. Este jueves, en el edificio de los murales de Evita se inocularon diez personas más que lograron acceder a la cúpula de la cartera sanitaria, sin turno previo, reseñó el medio local.
En ese grupo, tal como reveló Clarín, estuvieron el diputado Eduardo Valdés -amigo íntimo del Presidente- y el senador Jorge Taiana. Ambos se debían vacunar e hisopar antes de viajar con Fernández a México, este domingo. Finalmente fueron bajados de la comitiva.
También habrían sido vacunados Hugo Moyano, su esposa, Liliana Zulet, y su hijo Jerónimo, que tiene 20 años de edad y viven con sus padres. Hace tiempo que el líder gremial venía reclamando al Gobierno la vacuna para los camioneros de su sindicato.
Redacción Maduradas con información de La Nación
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