El cuerpo decapitado del venezolano, Álvaro Darío Cova Carrión, fue hallado flotando el pasado domingo 13 de marzo por pescadores en una playa conocida como Toco, en Trinidad y Tobago.
El venezolano era oriundo del estado Delta Amacuro, emigró a Trinidad y Tobago hace tres años, el cuerpo fue reconocido por el hermano de la víctima, Wilmer Call, gracias a un tatuaje que llevaba en la espalda con el nombre de la hija, Leonora Isabel.
“Mi hermano tenía dos niños y una niña. Llevaba tatuado en la espalda el nombre de su hija: Leonora Isabel”, detalló.
Cova, vivía con dos ciudadanos trinitarios con los que trabajaba en una cantera en Valencia y en una finca en Toco, el occiso fue visto por última vez un día antes de que fuera encontrado por los pescadores, cerca de su vivienda en el sector de Valencia en Trinidad y Tobago.
“El lunes me enteré de un cuerpo encontrado en una playa de Toco, pero nunca pensé que fuera mi hermano”, dijo
“Lo vio el sábado por la tarde. Ese mismo día mi hermano habló por teléfono con varios familiares en Venezuela”.
La policía de la Oficina de Investigaciones de Homicidios de la Región II continúa con las investigaciones del caso.
Redacción Maduradas con información de 2001Online