Andry Guillén, madre de la joven Naryeli Cacharuco, de 15 años, quien murió el 11 de enero en el centro de culto María Lionza ubicado en el río San Julián, de Caraballeda, en el estado Vargas, habló de los cambios en la vida de la menor.
la Verdad de Vargas
Explicó que su hija comenzó a presentar cambios la mañana del 31 de diciembre, ese día se desmayó y al despertar no hablaba, se comportaba agresiva y con mucha fuerza.
En medio del asombro la llevó a dos hospitales, los médicos no dieron con lo que sufría su hija, acudió a cultos evangélicos que no la ayudaron y finalmente la llevó a los espiritistas de San Julián.
Ahí le dieron un diagnóstico: «Tiene un daño».
Al respecto, contó: “El viernes 10 y sábado 11 fuimos al centro espiritista, allí me confirmaron que había un daño demasiado fuerte. Y es verdad, el paro respiratorio le dio allí, pero no le vino por neumonía como dijeron, ni por alguna condición de salud: sus valores estaban bien de acuerdo a una hematología completa que se le hizo en la clínica Provesalud un día antes de fallecer”.
Además detalló que una joven de 19 años, identificada como Stephanie Karolyne Rodríguez Jiménez, confesó ante el Cicpc que enterró prendas de la fallecida en el cementerio de La Guaira.
«Esa muchacha venía de Charallave y vivió como un mes alquilada a unas 5 casas más abajo. No tengo ni idea porque le hizo esto a Naryeli, no se si fue por envidia”, apunta.
“Un fin de semana, ocho días antes de la muerte, relata Andry, vino y se quedó en la casa. Yo trabajo en Caracas y salgo en la madrugada, cuando llegué en la tarde, noté que le había dado un brazalete de santería (ilde), yo se lo quité y lo tiré a la calle y desde allí para acá Stephany no puso un pie en mi casa, sino tres horas después de que la niña fallece”, señaló.
Redacción Maduradas con información de La Verdad de Vargas.
Lea también:
¡PENDIENTES! Reportan presencia de presuntos colectivos en los alrededores de la AN este #21Ene (+Fotos)