Grecia Rodríguez, hija del primer actor venezolano Gustavo Rodríguez, reveló en su cuenta en Twitter el nombre de las dos personas que la agredieron sexualmente cuando era una niña.
De acuerdo a su testimonio, el actor cómico que la violó a los seis años (denuncia que hizo el 29 de abril a través de un video en su cuenta en Instagram) habría sido Perucho Conde.
«Perucho Conde. Actor cómico del programa Cheverísimo, amigo de la familia. Abusó de mi cuando tenía 6 años de edad en el baño de hombres de Venevisión. Su excusa: era que esa sensación me haría una gran actriz», escribió Grecia en su cuenta en Twitter.
La primera denuncia sobre este hecho fue difundida en la red social Instagram, en la que la hija del recordado Gustavo Rodríguez expuso su testimonio en video:
«A los 6 años, en los baños de Venevisión, un gran actor cómico venezolano, muy amigo de mi familia además, muy respetado en toda la escena cultural venezolana, me violó. Con la excusa de hacerme entender cómo actuar mejor. Desde que nací quería ser actriz y no era un secreto para nadie lo tanto que yo quería y la pasión que tenía. En un momento de descuido, cuando mi papá estaba trabajando, era muy de noche y yo estaba sola, él, con el pretexto de hacerme sentir la conexión entre el personaje y la situación ficcional, me violó», contó con evidente pesar la joven agraviada.
La otra persona que Rodríguez afirma, cometió abuso sexual en su contra, fue identificado como Víctor Manuel López, profesor de canto lírico en la Escuela Nacional de Música Juan Manuel Olivares de Caracas.
«Desde los 12 años estudié canto lírico con él y abusó sexual y psicológicamente de mí de manera sistemática, con la excusa de convertirme en la mejor cantante de ópera desde Callas», denunció.
El segundo: Víctor Manuel López. Desde los 12 años estudié canto lírico con él y abusó sexual y psicológicamente de mí, de manera sistemática con la excusa de convertirme en la mejor cantante de ópera desde Callas. pic.twitter.com/cKMHBQ8EHM
— Grecia Augusta (@Grecia_Augusta) May 1, 2021
Rodríguez amplió su impactante testimonio, y dijo que revelaba los nombres para evitar que estas personas puedan cometer actos similares.
«El primero me hizo daño y mutiló mi niñez, desconozco su paradero; el segundo es el más peligroso. Sigue dando clases, sigue excusándose en Cristo y en la música para continuar su abuso. Hace tiempo los perdoné; esto es para perdonarme a mí, y para alertar a todas las personas», añadió.
Redacción Maduradas
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