Una pareja argentina hizo cicloturismo por seis países europeos durante un mes y medio. El diario La Nación realizó un reportaje sobre Emiliano Seco Valderramas y Anahí Varela, quienes viajaron a ese continente justo cuando cerraron las fronteras por el comienzo de la pandemia del coronavirus en 2020.
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Aunque Seco Valderramas, de 33 años de edad, trabajaba como entrenador físico y Varela, de 32 años, tenía un emprendimiento de zapatería, querían viajar y conocer el mundo.
Tras casarse, se enfocaron en organizar un viaje juntos, sin embargo, los ahorros solo alcanzaban para costear el pasaje y algún tiempo corto. “No teníamos la intención de emigrar porque en Argentina no nos iba tan mal, pero como pensábamos trabajar para costear el viaje empezamos a investigar qué opciones había para poder estar con legalidad”, contó Seco Valderramas.
De esa forma, hallaron la posibilidad de solicitar una visa de trabajo para Alemania, que costaba 85 euros y requería una demostración de fondos bancarios.
“Hay mucha demanda y cada año se pone más difícil conseguir un turno para poder aplicar a esta visa. Nosotros conseguimos el turno en noviembre de 2019 para ir a Buenos Aires a presentar la documentación en enero. Como somos de Catamarca no nos hicieron esperar y al día siguiente nos pusieron la visa en el pasaporte”, dijo Varela.
Recordó que el 11 de marzo de 2020 aterrizaron en Copenhague, Dinamarca, pero se encontraron con una ciudad vacía, y recibieron mails en que les cancelaban citas para realizar otros trámites que pensaban llevar a cabo para poder viajar y trabajar en Europa.
Desde Copenhague se trasladaron a Berlín, Alemania, donde consiguieron alojamiento y después de un mes pudieron trabajar.
Las entrevistas para obtener empleo eran online, pero el hablar inglés les abrió las puertas.
Crearon la cuenta en la red social Instagram llamada Travel Vamos, en la que relatan sus experiencias e intentan ayudar a otros a conseguir su sueño de viajar.
Este año comenzaron a probar suerte en el sector hotelero. Comenzaron a enviar curriculums en páginas de hoteles tanto en Alemania como en otros países. En una semana lograron obtener 14 entrevistas y, después de realizarlas, quisieron contratarlos en todos los empleos.
En un principio, no pudieron creerlo, pero después se percataron que tras la pandemia hace mucha mano de obra, ya que las personas que trabajaban en hotelería y gastronomía se especializó en estos sectores.
“Acá en Europa el turismo este año está explotado, vas caminando y ves en todos los barcitos carteles que buscan mozo y este tipo de empleos no calificados sobran. En una entrevista me llegaron a ofrecer que ponga yo el monto para decidirme a ir de otra empresa e irme con ellos”, precisó Seco Valderramas.
Para recibir apoyo por los diferentes pueblos y ciudades europeas que han recurrido, pusieron carteles en sus bicicletas. “A muchas personas les daba curiosidad, nos ofrecían quedarnos en sus casas, poner la carpa en su jardín, nos preparaban comidas y hasta nos dieron dinero para ayudarnos a seguir viajando”, añadió.
Aunque no era su plan inicial, decidieron establecer en Europa. El próximo año planean seguir su aventura y en 2024 asentarse en Italia o España.
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Redacción Maduradas con información de La Nación.
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