El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) tiene «responsabilidades» para obligar al líder opositor Henrique Capriles, gobernador del estado Miranda, a cumplir sus obligaciones al acusarlo por la violencia en las protestas.
Lo acusa de incitar a la violencia
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«Yo creo que el TSJ tiene grandes responsabilidades para obligar a este gobernador a cumplir con la ley y con los ciudadanos, sino que se vaya, que se vaya definitivamente el gobernador de Miranda, pusilánime, cobarde», exclamó Maduro en una comunicación telefónica con los asistentes a un acto de Gobierno.
«Por su culpa precisamente está sucediendo buena parte de este golpe de Estado, por su propia cobardía, saben ustedes que estoy hablando con el corazón», añadió.
Cacería de opositores
La acusación de Maduro contra Capriles ocurre a poco más de un mes de que el Gobierno encarcelara a otro de los principales líderes de la oposición, Leopoldo López, también acusado de incitar a la violencia con las protestas, y luego que le fuera retirada la inmunidad parlamentaria a la diputada opositora María Corina Machado, quien podría ser detenida en las próximas horas por los mismos cargos que le imputaron a López.
Manifestantes se acercaron a Ramo Verde para protestar contra la detención de Leopoldo López. Su padre habló.
El Tribunal Supremo ya ha cursado órdenes a varios alcaldes opositores para que procedan a la remoción de obstáculos utilizados en barricadas en la calle por grupos de opositores como forma de protesta y que han causado, según el Gobierno, varias de las más de una treintena de muertes registradas desde el 12 de febrero pasado.
Uno de los alcaldes, el del municipio San Diego en el céntrico estado Carabobo, Vicencio Scarano, fue condenado la semana pasada a 10 meses y 15 días de cárcel por desacato a ese fallo.
Maduro culpa a la «guarimba».
Maduro lamentó la muerte de Adriana Urquiola, una joven de 28 años tiroteada cerca de una barricada, o «guarimba», levantada en Los Nuevos Teques, en el sur de Caracas y parte del estado Miranda.
«Ella se bajó para poder pasar la guarimba y poder llegar hasta su casa, allí ese grupo guarimbero tenía una hora que acababa de encender esa barricada, a 50 metros del comando de la Policía estadal del estado Miranda», indicó.
Entre las víctimas se encontraba una mujer embarazada que era intérprete en un canal de la televisión.
El mandatario venezolano se preguntó «¿por qué la Policía del estado Miranda no actuó ayer? ¿Por qué el gobernador del estado Miranda no se puso los pantalones y fue a apagar esa guarimba que ellos mismos promueven y protegen?».
«Honor y gloria a ella como mujer trabajadora que en estos hechos violentos allí, producto de esa guarimba, por culpa del gobernador del estado Miranda, perdió la vida, lamentablemente», afirmó.
Por su parte Capriles señaló a través de la red social que ni la joven asesinada ni otra amiga suya que resultó herida «se encontraban en alguna protesta», y que la Policía seguía buscando el vehículo desde el que les dispararon
«Qué pena, vergüenza, salen algunos, como siempre, señalando, acusando, jugando con la vida de todos! Repugnan, solo tienen poder, más nada», agregó.
El conflicto venezolano afecta la información y también a los periodistas que cubren esta noticia a diario.
El ministro de Exteriores y dirigente del oficialista Partido Socialista, Elías Jaua, acusó a Capriles también en Twitter, y a la Policía municipal de Miranda, de omisión ante «la violencia guarimbera».
Venezuela está inmersa en un clima de protestas contra el Gobierno de Nicolás Maduro desde el pasado 12 de febrero, que han dejado un balance de más de una treintena de muertos, cientos de heridos y casi 2 mil detenidos, en su mayor parte libres con medidas cautelares.
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