“No puedo más (…) la doctora me ha dejado por loco. Esta es la salud cubana. Esto está pasando en el Hospital de Florida, Camagüey”, fueron partes de las últimas palabras de Enmanuel Lara Marianos, un joven de tan solo 34 años, quien falleció pidiendo ayuda desde una camilla de un hospital en Cuba.
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“No lo merecía. Dedicó su juventud a una Revolución que le dio la espalda”, cuestionó una de las allegadas al hombre, identificada como Yanilys Sariego, quien precisó que Lara Marianos era un paciente con el Virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
“Era el más grande de todo el grupo, grande de estatura y grande de corazón. No recuerdo haberlo visto ni una sola vez enfadado, siempre tenía una sonrisa afable en su rostro. Murió en un hospital pidiendo por ayuda médica. Este ser humano tenía 34 años de edad y una vida por delante”, agregó, tras reprochar al gobierno cubano, presidido por Miguel Díaz-Canel, por lo que está ocurriendo en los hospitales de la isla.
“Cuidó de su madre hasta el último de sus días y le entregó parte de su juventud a una revolución que luego le dio la espalda. ¡Prohibido olvidar! ¡Dejaste morir al más grande de nosotros, al más noble Díaz Canel, esta la voy a cobrar a título personal el día que esta dictadura caiga!”, dijo la mujer.
Redacción Maduradas con información de Cubanos por el Mundo
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