El pasado 30 de junio, el director general de la ONG Fundaredes, Javier Tarazona, acudió a la Fiscalía para solicitar que se investigue la relación entre altos funcionarios que han ejercido el poder en Venezuela con altos mandos de la guerrilla, una denuncia que llevó a sus detención en los siguientes días.
El Espectador
Tarazona junto a otros dos activistas de la ONG fueron detenidos por funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) y presentados ante un Tribunak de Terrorismo que les imputó los delitos de instigación al odio, terrorismo y traición a la patria.
De acuerdo con lo informado por Sebastiana Barráez en un trabajo publicado a través de Infobae, los cuerpos de inteligencia habían estado organizando un expediente contra Tarazona desde hace varios meses, a pesar de seguirlo, grabarlo, monitorear su organización y familia no lograron encontrar nada debido a que él ha actuado públicamente.
Sin embargo, recientemente hizo una denuncia contra uno de los hombres más poderosos a la sombra del chavismo lo que desató que ordenaran detenerlo.
Se trata de la denuncia que hizo contra el capitán de navío Ramón Emilio Rodríguez Chacín, ex ministro del Interior y exgobernador del estado Guárico.
Infobae
En una fotografía mostrada por Tarazona, aparece Rodríguez sentado en una mesa junto a su esposa, Carola Martínez; y los jefes del Ejército de Liberación Nacional (ELN) Nicolás Rodríguez Baautista, alias Gabino; Eliécer Herlinto Chamorro Acosta alias Antonio García, quien ahora es el máximo jefe de la organización guerrillera; e Israel Ramírez Pineda alias Pablo Beltrán, miembro del Comando Central del ELN.
La denuncia de Tarazona deja en evidencia la presencia de la guerrilla colombiana en Venezuela.
Infobae.
Redacción Maduradas con información de Infobae
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