Existe un hecho que, cada vez más, preocupa a la sociedad: el crimen organizado está cada vez más «profesional» y «sofisticado» en su s actividades. Ahora, aparentemente, no solo está en las calles, sino que ejecuta sus «labores» en la web y utilizando aplicaciones de citas e Inteligencia Artificial (IA).
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En ese contexto, expertos de Interpol, la Organización Internacional de Policía Criminal, alertó que los delincuentes no necesitan habilidades técnicas avanzadas ni mayor inversión de capital para cometer sus actos, a través de la tecnología.
«La tecnología es, tal vez, el factor de cambio más influyente en el panorama delictivo internacional», afirmó en un foro Jürgen Stock, secretario general de Interpol. Así lo reseñó BBC.
Además, en este panorama, llama la atención que, aunque las víctimas de estafas pertenecen a diversos grupos demográficos, algunos parecen estar particularmente en riesgo. A menudo, las víctimas son quienes buscan amor o conexión, empleo, las personas mayores y las aquellos con alfabetización digital limitada.
Los delincuentes van contra el público en general, contra las instituciones financieras, las empresas privadas y a la infraestructura crítica de los Estados.
Así es cómo los delincuentes de hoy están usando la tecnología y la IA para ejecutar sus actos:
Reclutamiento y radicalización de niños
Los delincuentes usan algoritmos para identificar y reclutar nuevos miembros para organizaciones criminales. Esto ocurre, fundamentalmente, en América Latina y, en su mayoría, los niños reclutados carecen de la presencia de adultos que los cuiden, lo que los hace más vulnerables.
En ese sentido, la politóloga Katherine Herrera Aguilar, consultora política en Seguridad pública y Defensa, refirió que estos menores de edad viven, por lo general, zonas donde no está presente ni la familia ni el Estado, y tampoco se encuentra el apoyo de la comunidad, debido a la situación crítica en términos económicos.
«Les crean videos en donde ven adolescentes como ellos de 14, 15 años, que manejan dinero, que utilizan un celular de alta gama, que tiene ropa e incluso una vivienda o un vehículo. Así los atraen. Con promesas falsas de lo que podía ser su vida«, aseveró.
Optimización de rutas de trafico ilícito
De acuerdo con BBC Mundo, el uso de IA en aplicaciones como Waze y Google Maps ha permitido a los criminales a mejorar sus rutas de tráfico de drogas, de armas e incluso de personas.
«El análisis de datos facilita a estas estructuras criminales identificar las rutas que son menos vigiladas o donde no existe control por parte de las autoridades nacionales de cada país», agregó Herrera.
Además, la experta detalló: «Los usuarios de aplicaciones colaborativas como Uber o Waze van avisando a otros conductores de lo que se encuentran en la vía. Si hay un control policial, si hubo un accidente o si hay un radar de velocidad o una cámara«.
Esta información permite a los criminales esquivar las zonas con más presencia policial.
Ingeniería social a gran escala
El uso de IA también ayuda a la lectura rápida de datos en plataformas sociales. Además, aplicada a cualquier plataforma social, no solo extrae la información en segundos, sino que permite la creación de comunicaciones automática, totalmente personalizadas y muy convincentes.
Entre otras cosas, las herramientas de IA permiten producir una foto realista, escribir con naturalidad en un idioma extranjero o enviar automáticamente un gran número de correos electrónicos con algunos programas gratuitos.
Creación automática de malware y de explotación de vulnerabilidades
Las autoridades también han alertado que los ciberdelincuentes están utilizando la IA para explotar la vulnerabilidades de programas nuevos. Normalmente, estos son programas o aplicaciones que, al ser tan nuevo, carecen de parches.
«Hemos visto un crecimiento exponencial de la velocidad en la que los hackers crean o explotan vulnerabilidades ‘0 day’ (día cero). Antes, para la explotación de ese tipo de vulnerabilidades, los ciberdelincuentes tardaban dos semanas, tres semanas, incluso un mes«, alertó Matthew Noyes, director de Política y Estrategia Cibernética del Servicio Secreto de los Estados Unidos.
Además, un experto en ciberseguridad, que pidió que su nombre no fuese revelado, ahora, con la IA, al día siguiente del lanzamiento de un producto o aplicación, ya se ven intentos de explotación.
«Al final la inteligencia artificial te crea código específico para explotar esa vulnerabilidad», dijo el especialista.
Así mismo, señaló que la IA también ayuda a crear código de virus informáticos de forma más rápida.
Mercado propio de herramientas para delinquir
Al mismo tiempo, los delincuentes copian lo que ven en los mercados legales. De hecho, en la Deep Web, se pueden encontrar ofertad de «software como servicio», con modelos de suscripción que dan herramientas a los criminales, los cuales incluyen productos fáciles de utilizar. Estos servicios incluyen desde videollamadas hasta herramientas de gestión de proyectos y servicio al cliente.
Los ciberdelincuentes tienen sus propios «servicios para delinquir», donde pueden comprar herramientas y conocimientos accesibles para ayudar a otros a llevar a cabo delitos.
Deepfakes y suplantación de identidad
Finalmente, se encuentran los deepfakes, los cuales son videos, imágenes o archivos de voz manipulados con software de inteligencia artificial para parecer reales y auténticos. Con estas herramientas, los ciberdelincuentes pueden llevar a cabo extorsiones, estafas y muchas otras actividades.
La IA permite crear un mensaje con fotos de alguien familiar en alguna situación que no es real o clonar la voz de alguien con haberla escuchado 5 o 10 segundos en una conversación por teléfono.
Cómo protegerte
Ante estas formas de operar, expertos coinciden en que es necesario mejorar el acceso a la información sobre estos esquemas y dar opciones de denuncia.
En ese sentido, algunas recomendaciones dadas por el Ministerio de Justicia de Argentina incluyen acciones que cada individuo puede realizar o evitar.
Estas son algunas formas de protección:
– No entregar datos personales a personas extrañas por teléfono, correos electrónicos o redes sociales.
– Configurar la privacidad en las redes sociales para que no queden expuestos los datos personales.
– Informarse y aprender sobre este tipo de amenazas.
– Usar una contraseña segura.
– Configurar la autenticación en dos pasos para estar alerta de accesos indebidos a cuentas.
– Poner atención a cualquier persona que pida información personal.
Redacción Maduradas con información de BBC
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