Debido a la crisis que atraviesa Venezuela, miles de venezolanos buscan legalizar sus documentos para emigrar. Esto se convirtió en un «negocio» para los bachaqueros.
Foto: La Prensa
Las personas revenden de manera ilegal las estampillas en 2 millones de bolívares, cuando su precio real no supera los 600 bolívares, reseñó Rafael Piña de La Prensa.
“Es una mafia entre los dueños de los locales y los gestores, quienes roban de manera descarada a las personas que buscan legalizar documentos. Hay unos precios que sacan el alma del cuerpo”, denunció el ciudadano Juan Pérez, quien está intentando apostillar sus documentos para irse a Chile.
César González, otro venezolano que busca migrar, contó que gastó 15 millones de bolívares en el registro mercantil.
“Gasté hace un mes por un registro mercantil más de 15 millones, pero lo más injusto es que el precio real no se acerca a ese monto del bachaqueo”, expresó.
Según la investigación realizada por La Prensa, los locales que venden las estampillas tienen un letrero en la puerta que indica “no hay timbres”, sin embargo, los gestores los consiguen fácilmente.
“Hay que preguntarle a los gestores que te brindan un abanico de opciones, pero eso sí, debes soltar los reales y lo peor es que todo el mundo lo sabe y se ha convertido en algo común”, explicó el abogado William Rojas.
Redacción Maduradas con información de La Prensa.
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