El exjuez español Baltasar Garzón recalcó que su cliente, el empresario colombiano Alex Saab, fue designado como “enviado especial” por el régimen de Nicolás Maduro en abril de 2018.
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“Se le asignó la tarea de adquirir los alimentos y medicamentos básicos necesarios para satisfacer las necesidades del pueblo de Venezuela en el marco de una serie de programas de bienestar social”, aseguró.
Durante una entrevista concedida a El Espectador, afirmó que en abril de 2020 fue encargado para adquirir gasolina iraní ante la profundización de la escasez de combustible en Venezuela.
Por consecuente, el abogado defiende que el presunto testaferro de Nicolás Maduro “es un agente político de la República Bolivariana de Venezuela”.
“Y, como tal, tiene derecho a la inmunidad e inviolabilidad consagradas en la Convención de Viena, la Convención de las Naciones Unidas sobre Misiones Especiales y el derecho internacional consuetudinario. En el momento de su detención ilegal, el enviado especial Saab estaba llevando a cabo su segunda misión especial humanitaria a Irán”, añadió.
Garzón denunció que cuando fue detenido en junio de este 2020 en Cabo Verde, Saab “portaba la debida documentación que acreditaba su calidad de agente diplomático”.
“Sin embargo, las autoridades policiales ocultaron ese dato. Semanas después, descubrimos entre los enseres devueltos esa documentación y se interpuso la correspondiente denuncia que sigue su trámite. En resumen, un cúmulo de irregularidades hacen inviable la consideración del debido proceso, de acuerdo con las normas internacionales y nacionales en la materia”, expresó el exjuez.
El empresario colombiano se encuentra arrestado en ese país africano desde hace seis meses a la espera de la resolución sobre su posible extradición a Estados Unidos, donde lo acusan de supuesto lavado de dinero.
Redacción Maduradas con información de El Espectador.
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