Nicolás Maduro afirmó en una amplia entrevista ofrecida al diario estadounidense The Washington Post que él estaba consciente de la conspiración del 30 de abril del pasado año 10 días ante de que esta sucediera.
@presidencialven – EFE
Aunque estaba al tanto del plan, señaló que permitió que ocurriera y solicitó a sus oficiales que intervinieran como potenciales traidores para revelar qué tan grande era la conspiración en su contra.
La intención era incorporar oficiales pro Maduro como el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) del oficialismo, Maikel Moreno, y el ministro de Defensa del régimen, Vladimir Padrino López.
Mientras que el objetivo era que tanto ellos como otros más respaldaran a Juan Guaidó, presidente interino de la República, en un levantamiento en la base militar de La Carlota para forzar a Maduro a abandonar el poder.
El plan se iba a llevar a cabo el 1° de mayo, no obstante, se adelantó por motivos que todavía hoy son desconocidos.
En ese sentido, el líder del socialismo en Venezuela resaltó que Padrino, Moreno y otros que la oposición creyó que le habían dado la espalda le contaron los pormenores de la conspiración.
Maduro aseguró que el 20 de abril le informaron en una reunión de alto nivel que el exjefe del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) Cristopher Figuera lo había traicionado. Por tal razón, le aconsejaron que lo relevara del cargo, pero él decidió tenderle una trampa al exfuncionario que terminó huyendo a Estados Unidos.
“Yo dejé que corriera lo que él estaba haciendo para ver hasta dónde podía llegar la conspiración. 24 horas antes yo iba a abortar el plan, pero ellos lo adelantaron”, expresó.
Redacción Maduradas con información de The Washintong Post.
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